Es común escuchar que la industria de los hidrocarburos consume mucha agua e incluso que es uno de los sectores que más la consume. Este debate sale a flote sobre todo cuando las regiones experimentan fuertes sequías o se reflexiona sobre la importancia de preservar los recursos hídricos.

Pero la realidad es que en Colombia -según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE)- el 82% de las extracciones de agua se hacen para la producción agrícola y agropecuaria, 11% para el suministro público y 7% para otras industrias de manufactura.

Dentro de este último porcentaje se encuentra la industria del petróleo que, según cifras del Viceministerio de Energía, usa el 0,35% del agua que se consume en el país. Colombia es uno de los países donde la industria de los hidrocarburos utiliza poca agua y se practica la eficiencia hídrica mediante las diversas dinámicas de reúso de este recurso.

Estudios del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), las actividades extractivas son las segundas entre los sectores económicos del país que menos consumen agua. Calculan que la industria de hidrocarburos no supera un consumo de 1,6% del agua nacional y enfatiza que las actividades que más agua demandan son la agricultura, la generación de energía y el sector pecuario.