El 30 de abril, los habitantes de los municipios de Aguazul y Tauramena, Casanare, se remangaron las camisas y tomaron picos y palas para regresar a la tierra cerca de 600 árboles frutales, nativos y arbustos. Una labor ecológica que sigue sumando a los más de 40.000 árboles donados por Parex, desde 2017, a las comunidades de sus zonas de Influencia.
No había mejor forma de conmemorar el Día Mundial del Árbol, celebrado el 29 de abril, que sembrando vida y agradeciendo el maravilloso e incuestionable papel que tienen los árboles como generadores de aire puro. Media hectárea arbolada representa el oxígeno que respiran, cada año, 18 seres humanos.
Los árboles son nuestros cómplices para combatir el cambio climático porque tienen la capacidad de absorber los gases contaminantes, como el dióxido y el monóxido de carbono, para convertirlos en oxígeno. Así que sembrar árboles es una contribución directa a la estabilización del clima.
Por si fuera poco, los árboles son reguladores del ciclo del agua, ya que devuelven el líquido vital a la atmósfera y mediante evaporación retienen agua de lluvia para filtrarla a los acuíferos y evitar sequías e inundaciones. Cada árbol significa agua para tres personas. Además, sus raíces sujetan las montañas y evitan derrumbes y desprendimientos de tierras.
En manos de los árboles también está la preservación de la sinigual riqueza natural de Colombia, segundo país más biodiverso del mundo con cerca de 53.000 especies de fauna y flora registradas. Así que simplemente son incalculables los beneficios de los árboles y, por ende, invaluable la tarea que representa la reforestación.
Mientras en las jornadas de siembra, aguazuleños y taurameneros abrieron hoyos, abonaron la tierra y regaron los nuevos arbustos, Johana Moreno, Alcaldesa de Aguazul, manifestó: “sembrando árboles estamos contribuyendo con el medio ambiente. Agradecemos a Parex por siempre pensar en nosotros y trabajar de la mano”.
Además de la siembra misma, las jornadas son eventos educativos y de concientización para las comunidades respecto al valor y cuidado de la naturaleza a fin de mejorar la calidad del aire que respiramos. Una forma sencilla y efectiva de trabajar en equipo para detener los efectos del cambio climático y la tala indiscriminada, y apostarle abiertamente al futuro.
Para Luis Enrique Arévalo, habitante de Tauramena, “esta jornada nos llama a que cada colombiano siembre un árbol –aunque lo mandatorio son tres- que es el oxígeno de nuestros pulmones. Parex es una gran empresa que nos ha colaborado mucho en Tauramena”.
Parex expresa, una vez más, su compromiso con los Llanos Orientales colombianos y sus habitantes. La Compañía se suma a la iniciativa del Gobierno Nacional de sembrar entre todos, para 2022, 180 millones de árboles.
¡Los árboles son nuestros mejores aliados! ¡Por más y más especies de árboles alrededor de nosotros!
¡Sigamos generando beneficios compartidos!